Agradecemos a nuestros amigos de SexoConSalud por la redacción de este interesante artículo sobre la importancia de los lubricantes. Con seguridad, será de mucho interés para nuestros seguidores.

En nuestra sociedad y nuestras mentes todavía no está normalizado el uso de los lubricantes e hidratantes vaginales. Desde SexoConSalud te contaremos por qué son tan importantes.

Hay muchas épocas en la vida de una mujer en que la lubricación vaginal natural se ve disminuida. Después de la menopausia esta falta de lubricación se acentúa y la mayoría de las mujeres la padecen y la sufren a diario. Es decir, lo más habitual en estas edades es notar que el cuerpo en general está más seco; la piel, mucosas,… y por supuesto la vagina.

Como siempre repito a mis lectores, de igual forma que sienten la necesidad de ponerse crema hidratante a diario, también deberían notar la obligación de aplicarse un hidratante vaginal a diario.

La falta de hidratación produce picores e irritaciones que se pueden complicar si no ponemos una solución tan fácil como ser constante en la aplicación de un hidratante vaginal.

La mayoría de veces que se habla de los lubricantes se relaciona con el coito para facilitar la penetración sexual. Eso nadie lo puede negar, pero lo que muchas veces NO nos comunican tan a menudo es la casi obligación del uso de estos productos a diario ya que la mucosa vaginal, como el resto de mucosas del cuerpo tienen que estar siempre húmedas. Como ya sabéis hay ciertas épocas durante la vida de una mujer que se nos ve disminuida la propia lubricación natural. (Embarazo, lactancia, estrés, uso de medicamentos,…)

Si se tienen relaciones sexuales de la misma forma que antes de la menopausia y sin tener en cuenta que el nivel de lubricación ha descendido, pueden existir molestias e incomodidades que hagan que la mujer tenga menos apetencia sexual ante la expectativa de una relación incómoda. Es muy recomendable el uso de lubricantes tanto para las relaciones sexuales como para el día a día si es que hay incomodidades por la baja lubricación vaginal.

Clara Sans, farmacéutica